El Banco de la Amistad: Para luchar contra el Bullying

El Banco de la Amistad, ha sido una
iniciativa por parte de una estudiante de 4to de primaria en un Colegio de
Burgos (España). Según reseña la noticia del Diario ABC Digital del 2/10/2019
Haizer Cozar, “…al final del
pasado curso escribió una carta a la directora del Colegio (…) «Hola
Ana, me gustaría que haya un banco de la amistad en el patio. Tiene que ser de
colorines y un cartel que ponga 'banco de la amistad' para quien se sienta solo
se siente y alguien que le vea sentado le pregunte: ¿Quieres jugar conmigo?»”.
Pero, seguramente nos preguntamos, ¿Cómo le ha podido surgir esta idea a la niña?, ¿Qué hizo para que le escucharan su iniciativa? ¿Fue alguna actividad requerida por parte del claustro docente?
Resulta que, según nos cuenta la noticia reseñada, un profesor de 4to de Primaria del Colegio Público Fernando de Rojas de Burgos “… sugirió a sus alumnos que crearan un proyecto . Entonces, la protagonista de esta historia, la burgalesa Haizea Cozar, escogió el tema del bullying y comenzó a investigar . Así, se topó con la historia de la niña Acacia Woodley, que ideó un banco de la amistad para acabar con las disputas en su colegio, un centro de Estados Unidos. ¿Y por qué no trasladar esta propuesta a su colegio burgalés?, pensó Haizea”.
Así, podemos observar la trascendencia que pueden tener las propuestas e iniciativas de un profesor/a para que su estudiantado investigue, reflexione y active su pensamiento crítico y creativo para abordar y gestionar “positivamente” situaciones desagradables que se pueden presentar en las clases e instituciones educativas en general. Lo que nos lleva a confirmar que todas/os en los espacios diversos de interacción humana (en este caso educativo) debemos estar atentos e involucrarnos en cómo mejorar y desarrollar una sana convivencia. No podemos no ver, decir o expresar nuestros desacuerdos, o simplemente no ayudar al que lo necesite, aupando de manera silenciosa el bullying y las acciones que desacrediten y violenten a otras personas.
De igual manera, la noticia nos informa que esta propuesta fue aprobada, y a partir de este curso 2019-2020 es una realidad en el patio del colegio. “La directora enmarca la iniciativa dentro del Plan de Convivencia del colegio , explica Ana María Martínez, recordando que la Consejería de Educación de Castilla y León fue pionera a la hora de animar a los colegios a contar con este tipo de iniciativas contra el «bullying»”.
Los Planes de convivencia son de obligación en los centros educativos, pero ¿cómo están estructurados?, ¿se ha realizado un análisis concreto de la realidad del Centro, y de sus necesidades y recursos? El Banco de la amistad podría ser una de las muchas herramientas que existen en la actualidad para mejorar la convivencia de estos espacios educativos, como métodos de prevención de la violencia y acoso escolar y el cyberacoso.
Algunas de las figuras que protagonizan los/as propias chavalas en sus centros educativos, contemplados en el marco del Plan de Convivencia escolar en algunas instituciones Públicas de España, son: las/os mediadores escolares, los/as ciberayudantes, los/as alumnas ayudantes y los/as agentes antirrumores.
Todas estas figuras contienen el manejo de un grupo de herramientas y habilidades preventivas que mejoran las relaciones/convivencia y generan un autocontrol de las emociones por parte de quienes las desarrollan y trabajan en los centros escolares. Es por ello que ver las herramientas de la mediación como mecanismos preventivos de conflicto y gestión positiva de los mismos podría ayudar de pegamento clave para concretar la cohesión social, partiendo de una realidad diversa, en material cultural y de pensamientos, puesto que todas/os somos Iguales pero diferentes.
Esta iniciativa del Banco de la amistad, se ha hecho viral en las redes sociales y Ana María Martínez, la directora del Colegio le comenta al Diario ABC digital que “ya son varios los centros educativos que se han interesado, por la iniciativa".
Gracias a esta noticia podríamos replantearnos nuevamente la pregunta del artículo anterior: ¿Qué clase de sociedad aspiramos?
Sí aspiramos una sociedad de no-violencia debemos instar e incentivar a las personas, desde la infancia a reconocer y respetar a los demás, mediante el diálogo y la escucha activa, reconociendo nuestras necesidades y las de los otros. Desde el profesorado y desde los hogares debemos estimular a los/as chavalas a leer, estudiar, profundizar, investigar y pensar cómo mejorar las situaciones y espacios de nuestro alrededor, plantando preguntas como: ¿Cómo te sientes en este lugar? ¿Hay algo que podría mejorarse? ¿Crees que todas/os somos iguales o diferentes? ¿Cómo te sentirías si pasaras por una situación así? ¿Confías en ti? ¿Te gusta quién eres? ¿Necesitas la aprobación de los demás para ser feliz? ¿Qué es la felicidad?
El respeto hacia los demás nace desde el propio respeto que debemos tener hacia nosotros, desde ese reconocimiento como personas razonables, sensibles y con diversos potenciales que pueden contribuir al desarrollo y mejora de una sociedad.
Entonces, ¿en qué sociedad quieres vivir?.












